68 % ellos.
64 % ellas.
Nada de mal para un país donde el mejor negocio (legal) es colocar una farmacia.
A pesar de los largos viajes en el Transantiago.
La humillante espera en los consultorios.
La mendicidad en las calles y los seudo trabajos.
A pesar de la fragilidad en las relaciones sentimentales y la apología que hacen algunos del divorcio como una pócima arreglalotodo.
A pesar de los cambios en la economía, el ascenso constante de los malls, el desarrollo de una cultura individualista que busca el prestigio y el éxito a toda costa, los chilenos hemos llegado a la conclusión que la mayor fuente de felicidad es la familia.
Yo hubiera preferido que la respuesta fuese “mi fe” como el mejor ingrediente de bienestar, pero que seamos un pueblo que valora las relaciones familiares por sobre las económicas, no me molesta.
Para leer más: Aquí
La pintura de:
Roberto Matta.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario