
Él nos hizo conocer el misterio de su voluntad
conforme al buen propósito
que de antemano estableció en Cristo,
para llevarlo a cabo cuando se cumpliera el tiempo:
reunir en él todas las cosas,
tanto las del cielo como las de la tierra.
Dios nos ha revelado el secreto de su voluntad,
según el plan que previamente se había trazado en beneficio nuestro.
De acuerdo con ese plan,
en el momento oportuno
nos recogerá dondequiera nos hallemos,
sea en el cielo o en la tierra,
para que estemos con él,
unidos a Cristo para siempre.
Dios nos mostró el plan
que había guardado en secreto y
que había decidido realizar por medio de Cristo.
Cuando llegue el momento preciso,
completará su plan
y reunirá todas las cosas del cielo
y de la tierra,
al frente de las cuales pondrá como cabeza a Cristo.
(Texto: Apóstol Pablo en su carta a los efesios)
(Fotografía de Srdjan Zivulovic para Reuters)